Por Antonio Rossi
A los pocos días de haber iniciado en diciembre de 2007 su primer mandato al frente de la Casa Rosada, la expresidenta y actual vicepresidenta Cristina Kirchner había aprobado, por medio del decreto 140, los lineamientos y la puesta en marcha del denominado "Programa Nacional de Uso Racional y Eficiente de la Energía (PRONUREE)".
Implementado por el exministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios que comandada Julio De Vido, el programa --que apuntaba a "mejor la eficiencia energética de los distintos sectores consumidores de energía"—tuvo como medida inicial saliente la compra y distribución gratuita de más de 12 millones de lámparas de bajo consumo.
Entregas a destiempo, fallas en el esquema de reparto y una millonaria y polémica adquisición de lámparas chinas que llegaron tras una triangulación por Cuba, llevaron a desactivar el PRONUREE a partir de 2010.
Ahora, a menos de tres meses de las PASO y cuando la campaña electoral comienza a acelerarse, el ministro de Economía, Sergio Massa y la secretaria de Energía, Flavia Royón decidieron reflotar el esqueleto del programa de eficiencia energética K con el lanzamiento del nuevo "Plan Iluminemos Argentina" (ILUMINAR).
Aprobado a través de la resolución 409 del área energética, el flamante "Plan ILUMINAR" prevé repartir, a nivel nacional y de manera gratuita, un total de casi 31 millones de lámparas de bajo consumo para los clientes residenciales de bajos ingresos que tras la aplicación del esquema de segmentación quedaron encuadrados en el Nivel 2 (N2).
Si se cumplen los objetivos del plan, en la región metropolitana del AMBA la cantidad de focos que se deberían distribuir a los hogares N2 de Edenor y Edesur alcanzarían un total de 10,4 millones.
Además de los usuarios residenciales de bajos ingresos que siguen teniendo sus consumos subsidiados, el plan ILUMINAR diseñado por los técnicos de Energía que responden a Massa también alcanza a: Asociaciones Civiles, Fundaciones y Clubes de Barrio y de Pueblo que podrán cambiar sus luminarias internas y externas.
Massa y Royón reflotan el plan eléctrico K de uso racional de energía
Según lo que establece la norma de creación del plan, el ILUMINAR tiene tres objetivos destacados:
-- Reemplazar y/o sustituir las lámparas actualmente utilizadas de alto consumo por otras de menor consumo y mayor eficiencia energética en las viviendas del país de menores ingresos.
-- Concientizar sobre las ventajas y/o beneficios derivados del uso racional y eficiente de la energía eléctrica.
-- Recambiar los artefactos de iluminación en clubes de barrio y de pueblo y en aquellas asociaciones de bien público que tengan por objeto el desarrollo de actividades deportivas y recreativas en todas sus modalidades y que faciliten sus instalaciones para la educación no formal, el fomento cultural de todos sus asociados, la comunidad a la que pertenecen y el respeto del ambiente.
En la fundamentación del programa, las autoridades de Energía pusieron de relieve la necesidad de adoptar medidas tendientes a la eficiencia y el uso racional con el fin de poder cumplir con los lineamientos del "Plan de Transición Energética al 2030" que guía el accionar del Gobierno para la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Como "autoridad de aplicación" y responsable del plan fue designada la Subsecretaría de Energía Eléctrica—conducida por el tucumano, Santiago Yanotti--, que tendrá a su cargo la suscripción e implementación de los convenios de distribución y recambio de las luminarias con las autoridades provinciales y municipales y las entidades de bien público.
La instrumentación del ILUMINAR se efectuará mediante la firma de convenios bajo la modalidad de transferencia de fondos no reintegrables del Estado Nacional. Al momento de la firma de los acuerdos operativos, los gobiernos del interior y las asociaciones civiles que se sumen al plan recibirán un anticipo financiero equivalente al 60% del monto total de cada proyecto que sea aprobado.
Los costos de las lámparas y luminarias serán financiados con fondos presupuestarios nacionales, quedando a cargo de los beneficiarios el pago del personal y los gastos asociados a las adecuaciones de las instalaciones que sean necesarios afrontar.
De acuerdo con la "letra chica" del plan, cada destinatario final de los hogares N2 recibirá un máximo de cuatro lámparas de bajo consumo por año.
En el caso del AMBA, los números oficiales indican que el bloque de usuarios de bajos ingresos N2 de Edenor y Edesur totaliza 2,6 millones de hogares que estarían en condiciones de recibir 10,4 millones de lámparas de menor consumo.
En el resto del país, en tanto, la cantidad de clientes residenciales N2 llega a 5,1 millones a los cuales se les deberían repartir un total 20,4 millones de lámparas más eficientes.
Fuente: iprofesional