La petrolera YPF confirmó este viernes su próximo proyecto en torno a Vaca Muerta, el mayor yacimiento de gas y petróleo no convencional del país, que implica la construcción de una terminal petrolera en el golfo San Matías, provincia de Río Negro, área natural protegida legalmente hasta agosto último, cuando la legislatura rionegrina modificó en tiempo record la ley que prohibía cualquier proyecto hidrocarburífero en la zona.
Desde mediados de 2022, el poder político y judicial de Río Negro y el Gobierno Nacional –el ministro de Economía, Sergio Massa, y la secretaria de Energía, Flavia Royón, han presentado y promovido públicamente el proyecto- al igual que la petrolera de bandera han sorteado los obstáculos contra el avance de la obra denominada Oleoducto Vaca Muerta Sur y su puerto petrolero en Punta Colorada, localidad en la costa atlántica de la provincia. Los vecinos y organizaciones denunciaron que YPF ni siquiera había completado los estudios de impacto ambiental del puerto petrolero pero la obra ya estaba anunciada. La petrolera lo confirmó ante la consulta de elDiarioAR. Ya se aprobó la construcción de la primera etapa del oleoducto sin saber si se va a aprobar el puerto petrolero que necesita si o si para exportar el crudo. O mejor dicho, a sabiendas de que se va a aprobar.
El caso será presentado por vecinos, un sector de la Iglesia y organizaciones ambientalistas nucleados en la Multisectorial Golfo San Matías ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, confirmaron representantes del colectivo.
Vaca Muerta Sur se construirá para vender petróleo argentino al mundo, anunció YPF. Se trata de un oleoducto de casi 600 kilómetros de longitud, que conecta la zona productiva en la provincia de Neuquén con la costa atlántica en la provincia de Río Negro, donde conectará con el puerto exportador de Punta Colorada, oficializó YPF en un video institucional lanzado este viernes. “Su objetivo es aumentar dos veces y media la capacidad de evacuación de la cuenca neuquina en los próximos tres años”, afirma el video.
La obra y el golfo
El principal punto de conflicto es la construcción de la terminal de exportación que YPF catalogó en el reciente video como “de clase mundial”. Este puerto petrolero estará ubicado en Punta Colorada, exactamente en el Golfo de San Matías, y tendrá una terminal de tanques a los que llegará el crudo desde Vaca Muerta a través del oleoducto. Desde allí se despachará el crudo en dos monoboyas instaladas a seis kilómetros de la costa, dentro del mar.
La conexión entre la costa y estas monoboyas es submarina. Es decir que el crudo viajará por debajo del mar unos seis kilómetros a través de una conexión. Los buques petroleros amarrarán cerca de las dos monoboyas para cargar el petróleo y exportarlo al mundo.
“El golfo de San Matías tiene características que lo hacen sumamente importante para la biodiversidad, como las corrientes de aguas calmas y cálidas o semicálidas, su ubicación y su productividad, ya que es un área importante de peces e invertebrados”, explicó a elDiarioAR el biólogo Luciano Valenzuela, investigador de Conicet en la Universidad Nacional del Centro de la provincia de Buenos Aires (Unicen) y del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB).
Debido a esas características, “esta zona es base para las ballenas francas que migran a Península Valdés, pero, además, Río Negro se está convirtiendo en otra área grande a donde la ballena franca va a tener cría”, afirmó Valenzuela. “Además –agregó el biólogo-, hay presencia y actividad de orcas y una lobería importante. También, en la zona de Las Grutas, se pueden avistar delfines desde muy cerca e incluso se han registrado ballenas jorobadas”.
En esta misma zona, también habita la colonia reproductiva más septentrional del pingüino de Magallanes. Las aves marinas se encuentran en el Parque Nacional “Islote Lobos”, a sólo 8 kilómetros de Punta Colorada.
Los habitantes de la costa atlántica de Río Negro también consideran al puerto petrolero que se construirá en el golfo San Matías como una amenaza para su economía y forma de vida. Las principales actividades económicas de la zona incluyen el turismo, buceo, avistaje de fauna marina y la pesca deportiva así como las pesquerías artesanales, aseguró a elDiarioAR Fabricio Di Giacomo, representante de la Multisectorial del Golfo San Matías, un colectivo que encabeza las protestas y reclamos judiciales contra la obra de YPF.
“El Golfo San Matías es nuestro hogar, donde nos criamos, donde trabajamos. Vivimos frente al mar, estrechamente vinculados con sus playas. Desde 1999 contamos con la protección de la ley 3.308, que nos garantizó un desarrollo sostenible tanto del turismo como de la pesca. Pero por sobre todas las cosas, nos garantizó el buen vivir. Por eso este proyecto nos pone bajo amenaza, no solamente a los miles de puestos de trabajo, sino también a nuestra forma de vida”, aseveró Di Giacomo.
Barriendo leyes
La ley 3.308 fue sancionada en Río Negro en 1999 con un objetivo claro: evitar la construcción de un puerto petrolero en el golfo San Matías y garantizar así la protección de la zona. El artículo 1° de esta ley era el principal impedimento legal para la construcción del oleoducto Vaca Muerta Sur y el puerto petrolero en Punta Colorada. Por eso, los diputados provinciales lo modificaron en tiempo record, sin debate en el recinto y a puertas cerradas para impedir el ingreso de la ciudadanía. Tampoco se había dado a conocer el proyecto de manera anticipada para garantizar el debate y las presentaciones de los posibles afectados, según la denuncia judicial.
De los 43 diputados provinciales, 42 votaron la modificación de la ley. A excepción del diputado Pablo Barreno (Frente de todos), los legisladores de Juntos Somos Río Negro, Frente de Todos, Frente Renovar, entre otros, dieron el sí. “Con esta rapidez con la que se desarrolló todo, la verdad, nos ha costado a muchos ver qué nos dicen los vecinos. Con este proyecto no tuvimos debate, no tuvimos discusión. Con una hora y media salió con la autoría de los legisladores y dictamen a favor en la plenaria”, se quejó el diputado Luis Ángel Noale (Frente de Todos y oriundo de una de las localidades afectadas) poco antes de la votación del proyecto que permitió modificar la ley.
Los legisladores que pidieron la palabra para explicar su apoyo al proyecto petrolero sostuvieron las mismas razones del Gobierno Nacional, la gobernación de Río Negro y de YPF: la obra permitirá el crecimiento económico de la provincia y el país, generará “miles de puestos de trabajo” y las divisas para salir de la crisis eterna. “Soberanía energética”, “crecimiento” y “autoabastecimiento” son las tres claves de los argumentos oficiales y empresariales para explicar la necesidad de la obra.
“Espero que por el bien de los rionegrinos, por el bien de los habitantes de la zona atlántica, que cuidemos la bendición que tenemos en este golfo, que seamos responsables”, pidió el legislador Noale en el recinto antes de votar a favor de la modificación de la ley.
El proyecto para modificar la ley ingresó el 22 de agosto a la Legislatura y lleva la firma de diputados de todos los bloques. Tres días después, el 25 de agosto, se votó en una sesión presidida por el entonces vicegobernador Alejandro Palmieri.
“En la provincia de Río Negro tenemos una ley desde 1999, la Ley 3.308, que protegió el golfo San Matías de cualquier tipo de contaminación por hidrocarburos. En agosto del año pasado, la Legislatura de Río Negro modificó esta ley de manera ilegal, de espaldas al pueblo, a puertas cerradas. Entonces decidimos presentarnos ante la Justicia para solicitar que la modificación de la ley se declare inconstitucional y que se restituya su forma original para que el golfo San Matías siga siendo un ecosistema marino protegido por la ley”, afirmó Di Giacomo a dicho diario.
Por reglamento, el proyecto se sometió a una segunda vuelta de votación el 9 de septiembre, fecha en la que los legisladores debían haber consultado a los interesados a favor y en contra del proyecto para sumar observaciones y modificaciones. Sin embargo, el proyecto siguió adelante con el objetivo que se había planteado. Ese día, volvieron a votar y sancionaron una nueva ley específica para modificar la ley de 1999. A finales de septiembre, fue promulgada por el Ejecutivo provincial, entonces a cargo de Arabela Carreras.
El artículo 1° de la ley de 1999, que quedó derogado por la nueva ley 5.594, decía: “Se prohíben en el Golfo San Matías y en el mar territorial rionegrino las tareas de prospección, exploración y explotación petrolífera y gasífera”.
Su modificación, viola los artículos 41 y 75 inciso 22 de la Constitución Nacional; los artículos 26, 85, 141 y 142 de la Constitución Provincial; el Acuerdo de Escazú; los artículos 18 y 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos; el 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y el 19.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, sin contar la Ley General del Ambiente, de acuerdo con la presentación judicial de organizaciones de todo el país que apoyaron a la Multisectorial Golfo San Matías, incluyendo la Asociación Argentina de Abogades Ambientalistas, Greenpeace, Fundación Patagonia Natural, Fundación Inalafquen, Pastoral Social Diócesis Alto Valle-Bariloche-Viedma, asambleas socioambientales, medios comunitarios, artistas y vecinos de las comunidades costeras.
La pata judicial
La presentación judicial fue presentada en diciembre de 2022 ante el máximo tribunal de Justicia provincial y fue rechazada el 10 de mayo último por “falta de legitimidad” de los demandantes, es decir, de la comunidad que habita y trabaja en torno al golfo San Matías.
Los jueces Sergio G. Ceci, Sergio M. Barotto y Cecilia Criado del Superior Tribunal de Justicia fallaron dándole la razón al fiscal de Estado de la provincia, Gastón Pérez Estevan; el fiscal de Estado adjunto, Luciano Minetti Kern; y al apoderado de la Provincia de Río Negro Ignacio A. Racca, quienes habían solicitaron al tribunal provincial que rechacen la demanda porque “los accionantes carecen de un interés concreto que los legitime como parte interesada”. También sostuvieron “la ausencia de daño real y concreto” del Oleoducto Vaca Muerta Sur y el puerto petrolero en el golfo San Matías porque “según la información” pública el proyecto “no existe” y es “meramente hipotético”, “tal cual luce del informe emitido por la Secretaría de Energía” de la Nación.
Los riesgos
“Los principales peligros de este proyecto son los derrames de petróleo y el tránsito de buques y la actividad costera por el puerto petrolero”, explicó Valenzuela. “Las ballenas francas son muy vulnerables al tránsito marítimo. Por ejemplo, las colisiones con los barcos son la principal causa de muerte de la ballena franca del Atlántico norte, especie hermana de nuestra ballena franca austral. ya que al ser lentas, cuando bucean y salen a la superficie para respirar, les cuesta mucho cambiar la dirección a tiempo y terminan siendo colisionadas”, afirmó el biólogo. “En los años 2000, Canadá desplazó toda la ruta marítima en sus aguas. Eso hizo que los reportes de colisiones disminuyeran, pero fue tarde. Aun así, sólo quedan alrededor de 500 ejemplares de ballenas francas del Atlántico norte, es una especie en extinción”, aseguró.
elDiarioAR consultó a YPF por qué se decidió construir el oleoducto en una zona protegida. “La zona de Punta Colorada tiene algunas condiciones particulares como la profundidad de sus aguas que permitirá el ingreso de grandes buques de exportación. Son los denominados buques VLCC (Very Large Crude Carrier) que hoy no pueden operan en ninguna terminal del país -hay otras seis en el país-. Además, la distancia con la zona central de Vaca Muerta es más corta que en otras alternativas analizadas”, respondió la petrolera. Además, “las condiciones hidrodinámicas permitirán que la terminal pueda operar el 98% del tiempo”.
YPF agregó que la zona tiene un antecedente de exportación de hierro a través de un puerto mineralero y que hace que la zona ya tenga historia de producción industrial y sea más apta para el desarrollo de capacidades industriales. La mina dejó de funcionar.
Sobre los estudios de impacto ambiental que deben realizar previamente a la autorización del proyecto, YPF respondió que “ya presentó a las autoridades de aplicación de Neuquén y Río Negro el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del tramo 1 del oleoducto Vaca Muerta Sur, que va desde la zona central del desarrollo en Vaca Muerta hasta el norte de la localidad de Allen”. “Desde fines del año pasado se están realizando los EIA del tramo 2 del oleoducto, que va desde Allen hasta Punta Colorada, y de la terminal de exportación”. Estos estudios debían ser presentados en estos días, de acuerdo a la última información proporcionada por YPF.
Fuente: Análisis Digital