La decisión del Gobierno de descongelar dos impuestos que impactan en los combustibles, y cuyo cobro estuvo suspendido por el lapso de dos años, activará un nuevo aumento de las naftas en el inicio de marzo. La suba se corresponderá con lo establecido por el oficialismo en cuanto a "regularizar" la carga impositiva fijada para, precisamente, las naftas y el gasoil. El ajuste se aplicará el 1° del mes próximo y también habrá incrementos durante los meses de abril y mayo a partir de este mismo esquema. Cámaras del ámbito del expendio señalan que el impacto de la actualización de los impuestos implicará subas que, según el distrito, podrían alcanzar al 7% en las estaciones de servicio.
El incremento que viene refiere a la postura del Gobierno de trasladar al precio un porcentaje derivado del incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente al primer y segundo trimestre del año pasado.
Esa fracción es aquella que, por ley, corresponde a los impuestos ICL e IDL que rigen para el combustible y que la gestión de Alberto y Cristina Fernández suspendió para tratar de frenar la escalada inflacionaria y la pérdida de poder adquisitivo.
En contraposición a esa postura, el gobierno de Javier Milei decidió levantar el freno a ese gravamen y activar subas sucesivas con el fin de recuperar el tiempo impositivo perdido. En tanto, la inflación acumulada en ese lapso superó el 50 por ciento, en el sector estiman que los aumentos partirán del 4% para alcanzar niveles más elevados.
Naftas: el aumento que llega en marzo
Desde organizaciones como la Cámara de Expendedores de Neuquén y Río Negro se señaló que, en el caso del interior del país, el incremento que viene podría incluso alcanzar al 7%.
"El Gobierno comenzó a ‘renovar’ esos impuestos, de forma que lo están haciendo de forma paulatina, y lo que llegó de las petroleras fue drástico en un período de un mes, casi dos, para llegar a estar cerca del equilibrio", dijo al respecto Carlos Pinto, uno de los referentes de la entidad.
El directivo reconoció que las últimas subas "mejoraron la ecuación" del segmento en general, pero advirtió que "las que todavía están atrasadas son las arcas de Nación por esos impuestos del dióxido de carbono y el impuesto a la transferencia de combustibles".
En torno a la cámara dan cuenta, también, de la preocupación que subsiste entre varios empresarios del expendio ante la suba que viene. Ocurre que, por efecto de los incrementos continuos que vienen evidenciando los combustibles, la demanda presenta una caída preocupante, sobre todo fuera de Capital Federal.
"A nivel nacional se habla de una caída de la venta de combustibles del 30%", declaró el mismo Pinto hace pocas horas. En ese sentido, un informe de la consultora Economía & Energía arrojó que la búsqueda del mejor precio en el actual escenario de crisis económica, aumentos de valores y bajos sueldos golpeó de forma directa a los combustibles premium. Así, la venta de la nafta grado 3 bajó un 7% interanual.
El Gobierno pidió moderación a las petroleras
A principios de este mes, la gestión que encabeza Javier Milei solicitó a las petroleras que aumenten con menor vértigo y mantengan en pausa la pretendida paridad con la cotización global del crudo.
La intención oficial pasa por otorgar un "respiro" a los bolsillos en plena instancia de aumento del transporte y los ajustes previstos para los servicios públicos.
"Si bien los dichos sobre ese pedido surgieron como un rumor, lo cierto es que la solicitud resultó real por la forma en que vienen aumentando los combustibles. El ritmo ha sido incesante, incluso para sorpresa de quienes integramos la cadena de comercialización", dijo a iProfesional un actor del ámbito del expendio.
"Estamos hablando de un nivel de subas que en el caso de petroleras como YPF dispararon el precio del litro de algo más de $350 hasta alcanzar los 950 según el punto de venta. Alinearse con los precios internacionales implicaría tirar abajo aún más la demanda, que solo en el último mes cayó más del 20%", añadió la fuente.
Fuente: iProfesional