Junto a la reciente suspensión del servicio en algunas ciudades y la baja de licitaciones clave para reactivar ramales paralizados, el desguace ferroviario previsto por el gobierno de Javier Milei queda en evidencia con la proyección de 3.000 despidos en Trenes Argentinos.
Ante el pedido de "reducción de gastos" por parte del directorio de la empresa, el gerente administrativo de Trenes Argentinos, Jorge Álvarez Holmberg, elevó un "plan de optimización de gastos en personal" que propone "mil desvinculaciones por mes" de abril a junio, con el fin de que la empresa logre "un ahorro anual aproximado de $13.000 millones".
Calculando una antigüedad promedio de 13 años de los trabajadores a despedir, el documento dirigido al presidente de Trenes Argentinos, Jorge Burgos, prevé un costo de indemnizaciones por $56.400 millones.
Fuentes gremiales consultadas se manifestaron en alerta por ese plan y señalaron que las autoridades de la empresa les anunciaron que, próximamente, iniciarán propuestas de retiros voluntarios. Creen que eso será la antesala al envío de telegramas de despido.
"De avanzar en desvinculaciones seguramente los sindicatos del sector tomaremos decisiones en conjunto", señalaron a LPO desde la Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos (Apfda) que conduce Adrián Silva.
La inminencia de los despidos se percibe en varias ciudades. Por caso, en Bahía Blanca, donde hace más de un año está interrumpido el servicio a Constitución, el representante local de La Fraternidad, Genero Leiva Chávez, dijo que desde el Gobierno le confirmaron que el tren de pasajeros no se reactivará.
"La realidad es que estamos a la espera de que en las próximas semanas lleguen los telegramas de despidos", admitió a Radio Urbana Bahía Blanca.
"Hay una falta de información oficial y una falta de previsibilidad sobre el futuro del servicio", dijo a LPO el concejal bahiense y titular de la UCR local Pablo Daguerre, quien sostuvo que la incertidumbre sobre el retorno del servicio Bahía Blanca-Plaza Constitución "es el denominador común al gobierno saliente y al entrante".
"Hubo y hay una falta de inversión y controversias con los concesionarios privados que deberían haber hecho las inversiones y nunca las hicieron. Las concesiones están vencidas y fueron prorrogadas, sin las exigencias correspondiente. Jamás hubo decisión del gobierno de Alberto Fernández de exigir los cumplimientos de los contratos", agregó Daguerre, que consideró que este panorama de recorte de servicios "es profundizar el centralismo y relegar el interior profundo".
En paralelo, Trenes Argentinos dio de baja la licitación para readecuar las vías de la línea Roca entre Ayacucho y Tandil. El servicio de trenes de pasajeros a la ciudad serrana se paralizó en 2016 y, aunque se avanzó en un primer tramo, entre Maipú y Ayacucho, la caída de la licitación del segundo tramo detona las expectativas de reactivación.
A la vez, dos polos industriales relevantes en la provincia de Buenos Aires, Zárate y Campana, también se vieron afectados por el desmantelamiento de los servicios ferroviarios sobre el que avanza el gobierno libertario.
El ramal Villa Ballester-Zárate de la línea Mitre ahora llega solo hasta Escobar. Ese recorte "hasta nuevo aviso", que deja fuera de servicio a las estaciones Río Luján, Otamendi, Campana y Zárate, disparó el malestar del intendente PRO Marcelo Matzkin, que venía dando señales de sintonía con el Gobierno.
"Zárate necesita que el tren siga llegando. Es injustificable que un municipio con casi 150 mil habitantes, lleno de industrias y con una necesidad de comunicación diaria con demás ciudades se quede sin tren. No toda decisión debe ser justificada por lo económico", dijo.
Y agregó: "El tren para Zárate es estratégico y por eso he solicitado una reunión con la autoridades de Trenes para el próximo viernes para pedir formalmente por la recuperación integral de la llegada del ramal".
En Campana, en tanto, el bloque de Unión por la Patria tiene previsto enviar un proyecto de resolución, tanto a la empresa, como a las autoridades de la Subsecretaría de Asuntos Ferroviarios, solicitando la restitución inmediata del servicio.
"El temor al cierre del ramal es notorio. Por una cuestión de costos, muchos vecinos utilizaban este servicio para trasladarse entre estas ciudades y a Capital Federal", dijo a LPO el concejal Mariano Ruiz, que cuestionó el silencio de la gestión local a cargo de Sebastián Abella (PRO): "Lamentablemente, desde el municipio no elevaron un reclamo formal", dijo.
En medio de la puja salarial y el recorte de servicios que amenaza con una escalada de despidos, los trabajadores advierten una creciente falta de mantenimiento de las unidades.
Fuente: LPO