El 12 de agosto pasado, salió en el Boletín Oficial un decreto que, entre otras medidas ligadas al sector energético, disponía que la Secretaría de Energía tenía 180 días para llamar a concurso público nacional e internacional para "proceder a la venta del paquete accionario mayoritario o controlante" de cuatro centrales hidroeléctricas.
La concesión de las empresas Alicurá, Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila está vencida y fue prorrogada por un año para permitir la relicitación. Por el decreto 718/2024 era la cartera que conduce Eduardo Rodríguez Chirillo la encargada del proceso.
Pero ahora, un mes y medio después de aquel decreto, Javier Milei firmó otro en el que reemplazan el artículo que le otorgaba el mandato a Energía para pasárselo a la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, que maneja Diego Chaher, en "coordinación" con Energía. Chaher pasó de ser asesor a tener rango de secretario y convertirse en "el brazo ejecutor" de las privatizaciones.
La Ley Bases autorizó la venta de ocho empresas: Enarsa e Intercargo, AYSA, Belgrano Cargas, Trenes Argentinos (Sofse) y Corredores Viales, Nucleoeléctrica Argentina (NASA) y Yacimientos Carboníferos Río Turbio.
A estas ahora se suma la licitación de las hidroeléctricas. Las cuatro represas en cuestión están ubicadas en las provincias patagónicas de Neuquén y Río Negro:
La intención del Estado sería volver a licitar cada una por 30 años bajo un procedimiento competitivo nacional e internacional.
Las concesiones ahora están en manos de empresas privadas: Orazul Energy (comprada por el Grupo Aconcagua, de capitales locales) opera el complejo Cerros Colorados, la italiana Enel gestiona El Chocón-Arroyito, la estadounidense AES está a cargo de Alicurá y Central Puerto, también de capitales locales administra Piedra del Águila.
Desde el sector privado analizaron el decreto en el que se transfiere el poder decisión sobre las hidroeléctricas como "una más de las múltiples internas". Y agregaron: "De todas maneras, de una u otra forma las van a adjudicar, quien lo haga ya parece importar poco a todos".
En la actualidad, la potencia nominal instalada entre todas las centrales es de unos USD 4.170 megawatts (MW), que representan en torno al 10% y 15% de la matriz energética nacional. Desde este año comenzarán a vencer otras 15 represas concesionadas que, aunque son de menor caudal de generación, se espera que corran la misma suerte que las del Comahue.
Fuente: Clarín