El proyecto del Presupuesto nacional para 2025 contempla un fuerte recorte en los proyectos ferroviarios.
La iniciativa, actualmente en debate en comisiones en la Cámara de Diputados, no considera la continuidad de numerosos proyectos de infraestructura ferroviaria, incluso de aquellos que cuentan con financiamiento internacional. Llamativamente, incluso desecha algunos que fueron incluidos dentro del listado de proyectos prioritarios en el marco de la emergencia ferroviaria.
En contraste con el proyecto del Presupuesto 2024 presentado en los últimos meses de la gestión anterior –que no fue aprobado ni tampoco reemplazado por otro proyecto del nuevo gobierno- no se incluye la obra de modernización integral de la línea Mitre, ni la compra de nuevas triplas para servicios regionales, ni la modernización y electrificación de las líneas San Martín y Belgrano Sur, ni las obras de renovación de infraestructura carguera para las líneas Belgrano y San Martín.
En cambio, solo se mantienen tres proyectos en el AMBA, con diversos grados de avance. Estos son la culminación de obras de modernización de la línea Roca -que actualmente están en ejecución-, la conclusión del viaducto de la línea Belgrano Sur a Plaza Constitución -casi totalmente paralizado- y la muy demorada compra de 200 coches eléctricos adicionales para la línea Roca.
LAS OBRAS QUE QUEDARON AFUERA
Modernización de la línea Mitre
Una de las obras omitidas en el proyecto de Presupuesto 2025 es la modernización integral de la línea Mitre, que posee asignado un crédito de casi 350 millones de dólares del Banco Mundial.
Esta iniciativa abarca la renovación de la parrilla de vías de Retiro Mitre -prácticamente finalizada aunque restan algunas obras-, la renovación integral de vías del ramal Tigre y la electrificación de los tramos Victoria – El Talar y José León Suárez – Benavídez. A su vez, también se preveía renovar el tercer riel en la totalidad de la línea, la construcción de dos nuevas estaciones y obras eléctricas, entre otras intervenciones.
Los avances del proyecto durante el corriente año fueron casi nulos: las obras de Retiro -el aspecto más avanzado del proyecto- permanecen inconclusas y avanzan a muy bajo ritmo, en tanto que las obras de renovación del ramal Tigre, adjudicadas en 2023, todavía no han comenzado. Si bien este aspecto de la obra ha sido incluido dentro de la emergencia ferroviaria, por el momento no hay indicios de que vayan a ejecutarse pronto: en paralelo, las condiciones y tiempos de viaje en el ramal han empeorado notoriamente.
Otros aspectos del proyecto tuvieron aún peor suerte: las obras para la renovación y electrificación del tramo Victoria – El Talar fueron dadas de baja, mientras que los puntos restantes ni siquiera llegaron a ser licitados.
50 triplas para trenes regionales
Otro de los proyectos recortados fue la compra de 50 nuevas triplas diésel para servicios regionales.
Se trata de una omisión llamativa, ya que la operación había sido mencionada dentro de la lista de prioridades en el marco de la emergencia ferroviaria y que durante este mismo año Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) había demostrado cierto interés en avanzar con la operación, analizando cambios en las cantidades a adquirir por trocha.
Vale recordar que la licitación para esta compra había sido lanzada en 2022 y fue adjudicada a CRRC el año pasado. Si bien ya tiene contrato firmado, la compra “se encuentra sujeta a la condición suspensiva de celebración del convenio de financiamiento” entre la República Argentina y el prestamista chino, algo que depende íntegramente del Ministerio de Economía. Esto significa que la operación no posee fondos asignados hasta el momento.
Electrificación de la línea San Martín
El proyecto de modernización y electrificación de la línea San Martín tampoco figura en el presupuesto para 2025.
En este caso, la eliminación tiene una explicación más evidente: a mediados de este año, el Gobierno resolvió dar de baja el crédito que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) había otorgado para la ejecución del proyecto. La decisión fue justificada entonces en el hecho de que las autoridades consideran que el proyecto “no es prioritario”, por lo que consideraban pertinente reasignar el crédito para otros fines no ferroviarios. La falta de financiamiento implica la virtual caída de las obras.
La iniciativa contemplaba la electrificación de la línea entre Retiro y Pilar, la renovación integral de las vías en dicho tramo -este aspecto había llegado a ser licitado, pero su adjudicación quedó pendiente-, la construcción de una subestación y nuevos talleres, la instalación de nuevo señalamiento y la reconstrucción de la estación Pilar, entre otras intervenciones.
Renovación y electrificación de la línea Belgrano Sur
La mayor parte de las obras de modernización de la línea Belgrano Sur también quedaron afuera del Presupuesto 2025. Solamente se incluyó la finalización del viaducto entre Sáenz y Plaza Constitución (ver más abajo).
En este sentido, quedaron excluidas las obras de modernización del ramal M entre Tapiales y Marinos del Crucero General Belgrano -que cuentan con un crédito de 150 millones de dólares de la CAF- y que abarcan la renovación integral de vías entre Tapiales y Marinos y la duplicación entre Libertad y Marinos -ambas incluidas dentro de la emergencia ferroviaria- y la construcción de un viaducto entre Tapiales y Aldo Bonzi.
También fue marginado el plan de modernización integral de la línea -a ejecutarse con un crédito de 600 millones de dólares del Banco Mundial y otro crédito complementario de 75 millones de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD)-, que contemplaba la electrificación de la línea en sus dos ramales, desde Plaza Constitución a González Catán y a Marinos del Crucero General Belgrano, y la renovación de vías del ramal G entre Tapiales y González Catán, la construcción de una subestación y talleres en Tapiales y obras de señalamiento, entre otras intervenciones.
Belgrano Cargas y San Martín Cargas, también marginados
Fuera de los proyectos ferroviarios para pasajeros, el sector carguero también sufrió un fuerte recorte: el proyecto de Presupuesto 2025 tampoco menciona las obras de infraestructura que iban a ejecutarse con financiamiento chino en los ferrocarriles Belgrano y San Martín.
A diferencia de años anteriores, no hay ninguna referencia al proyecto del Belgrano, que se ejecuta con financiamiento de China Machinery Engineering Corporation (CMEC).
Este programa incluía tanto las obras comprometidas en etapas previas como las de la “adenda 4”, que abarca más de 1200 km de renovación integral de vías, el mejoramiento de otros 230 km y la construcción de obras clave, como la circunvalación ferroviaria a la ciudad de Santa Fe, que cuenta con un notable nivel de avance pero cuya construcción se encuentra paralizada. A estas se suma la aún no ratificada “adenda 5”, un paquete clave de 816 millones de dólares, que contempla la renovación de 911 km de vías y la compra de más locomotoras y vagones, parte de los cuales se fabricarían en el país.
Tampoco fue incluido otro importante proyecto que se encontraba demorado pero que se buscaba impulsar: la renovación de más de 1800 km de vías del Ferrocarril San Martín en el corredor Buenos Aires – Rufino – Rosario – Mendoza.
Este crédito de 2600 millones de dólares comenzó a negociarse a mediados de 2020 y fue finalmente acordado con CRCC en diciembre de ese mismo año. Recientemente Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF) solicitó al Ministerio de Economía prorrogar ese acuerdo para evitar su caída, pero su no inclusión en el Presupuesto 2025 deja al proyecto completamente en el limbo.
Cabe recordar que si bien la iniciativa apuntaba fundamentalmente al transporte de cargas, también hubiese tenido un impacto positivo sobre los servicios de pasajeros de la línea, muy golpeados por los recortes realizados durante este año: actualmente el único que conserva la línea funciona hasta Junín.
LAS OBRAS QUE SÍ FUERON INCLUIDAS
Finalización de obras en la línea Roca
Uno de los pocos proyectos ferroviarios contemplados dentro de la propuesta de Presupuesto 2025 es la finalización de los trabajos de modernización de la línea Roca. En este caso, se trata de obras financiadas con un crédito de 130 millones de dólares otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ampliación del préstamo original de 2013.
Este proyecto abarca los trabajos de renovación de vías entre City Bell y La Plata y la reconstrucción de la estación Darío Santillán y Maximiliano Kosteki (Avellaneda) –ambas actualmente en ejecución e incluidas en la emergencia ferroviaria-, así como la finalización de las obras de señalamiento y de renovación de vías terceras, pasos a nivel y los cuadros de estaciones de los ramales La Plata y Vía Circuito.
Culminación del viaducto de la línea Belgrano Sur
El presupuesto 2025 prevé dar continuidad a las obras del viaducto entre Sáenz y Plaza Constitución. Este proyecto, de unos 115 millones de dólares, es financiado parcialmente con un crédito de la CAF, de 55 millones, otro de FONPLATA, de 35 millones, y el resto a cargo del Tesoro.
Si bien las obras están notablemente avanzadas y falta relativamente poco para su finalización, lo cierto es que los trabajos estuvieron prácticamente paralizados durante todo este año por el fuerte ajuste a la obra pública.
Cabe recordar que tanto este proyecto como las citadas obras en la línea Roca habían sido traspasadas meses atrás a la Secretaría de Transporte. Ambas iniciativas estaban en manos de la Dirección General de Programas y Proyectos Sectoriales y Especiales (DGPPSE), organismo que había quedado acéfalo e inactivo desde el cambio de gobierno. Otros dos proyectos manejados por este organismo -la modernización del Mitre y del San Martín- no fueron traspasados ni tampoco incluidos en el Presupuesto 2025.
200 coches adicionales para la línea Roca
En el proyecto de Presupuesto 2025 volvió a ser incluida una muy demorada iniciativa de importancia para la línea Roca: la compra de 200 coches eléctricos adicionales.
Se trataría de unidades idénticas a las que actualmente circulan allí. Su incorporación permitiría configurar formaciones de ocho coches (en lugar de los siete actuales), a la vez que jubilar a los veteranos trenes Toshiba. Con esto, la flota eléctrica del Roca quedaría uniformada con 500 coches de origen chino.
Si bien esta compra fue acordada hace más de siete años, se encuentra demorada por razones crediticias: la operación es íntegramente financiada por el Banco de Desarrollo de China (CDB). Las negociaciones entabladas en los últimos años con las autoridades chinas no dieron los frutos esperados. No obstante, su mantenimiento en el proyecto de Prespuesto 2025 demuestra el interés de Trenes Argentinos en avanzar con la operación.
Fuente: enelSubte